
El reciente censo en Bolivia ha desatado un nuevo debate político, y lo que comenzó como una discusión sobre la precisión de los datos se ha transformado en un tema inesperado: la descendencia de los legisladores. La revelación ha sorprendido al mostrar que la mayoría de los políticos bolivianos de la nueva generación, con edades comprendidas entre los 20 y 40 años, han decidido no tener hijos.
Entre los legisladores sin hijos se encuentran:
- Luisa Nayar (29 años)
- Mayra Zalles (30 años)
- Cielo Veizaga (23 años)
- Joselinne Pinto (33 años)
- Sara Kattya Condori (25 años)
- Daniel Prieto Tomelich (28 años)
- Maria Khaline Moreno (29 años)
- Aleiza Rodríguez Montero (30 años)
- Tacni Elvis Mendoza (30 años)
- Leonardo Loza (40 años)
- Andrónico Rodríguez (35 años)
- Andrea Barrientos (35 años)
- Manuel Ormachea (36 años)
- Lisa Claros (40 años)
- Estefanía Morales (36 años)
Este hallazgo pone de manifiesto una tendencia generalizada en la nueva generación, que ha optado por no tener hijos. Esta decisión ha desatado una ola de reacciones y comentarios, ya que plantea preguntas sobre las prioridades y el futuro de esta generación en la sociedad boliviana. La controversia persiste mientras se exploran las posibles implicaciones de este fenómeno en el panorama social y político del país.