
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), en coordinación con el Ministerio de Defensa, ha intensificado los controles en la distribución de combustibles para prevenir su desvío al contrabando. Como parte de estas medidas, se ha dispuesto que las cisternas sean custodiadas por efectivos militares desde las plantas de distribución hasta las estaciones de servicio en todo el país. Esta acción refuerza el Plan Soberanía, una estrategia que busca garantizar el abastecimiento de combustible en cada región.
“Estamos implementando controles más estrictos. Hace meses iniciamos el Plan Soberanía con apoyo militar, y ahora cada cisterna está siendo escoltada por soldados desde las plantas de almacenamiento hasta las estaciones de servicio”, señaló Germán Jiménez, director de la ANH, durante una conferencia de prensa. El sistema de monitoreo en tiempo real y la vigilancia militar permitirán asegurar la trazabilidad de los combustibles, evitando cualquier desvío durante su traslado.
Este martes, se llevaron a cabo despachos de combustible hacia el norte paceño, donde más de 28 estaciones de servicio recibirán el suministro. Según la ANH, cerca de 1.000 militares son desplegados semanalmente para garantizar la seguridad en la distribución. «No solo los militares custodian las cisternas, sino también el personal de la ANH está presente en cada estación de servicio», destacó Jiménez, reafirmando el compromiso en la lucha contra el contrabando de combustibles.