
El Gobierno de los Estados Unidos ha formalizado la solicitud de extradición del exjefe de la policía antidroga, Maximiliano Dávila, requerido por la Justicia estadounidense por su vinculación con el narcotráfico. Esta información fue confirmada por el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Marco Jaimes.

Jaimes indicó que la solicitud fue recibida a finales de septiembre y ha sido inmediatamente asignada a un magistrado relator, quien tendrá la responsabilidad de elaborar el proyecto de resolución que será presentado a la Sala Plena del TSJ. «La solicitud está en manos del magistrado relator, quien tiene hasta 60 días para remitir su informe», declaró.
El exjefe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) fue aprehendido el 22 de enero de 2022 en Villazón, Potosí, mientras intentaba cruzar la frontera hacia Argentina. Las investigaciones lo vinculan con una organización que refinaba cocaína en Bolivia, proveniente de países vecinos, para su posterior exportación a Estados Unidos.
Tras su detención, Dávila fue recluido en el penal de San Pedro, donde se encuentra bajo arresto preventivo por el presunto delito de legitimación de ganancias ilícitas. El TSJ, a través de un auto supremo emitido el 14 de agosto de este año, ordenó su detención preventiva con fines de extradición, lo que subraya la gravedad de las acusaciones en su contra.
La solicitud de extradición de Dávila marca un hito significativo en la lucha contra el narcotráfico en Bolivia, así como un llamado a la cooperación internacional en la persecución de delitos relacionados con el tráfico de drogas. Las autoridades bolivianas ahora enfrentarán el desafío de decidir sobre el futuro del exjefe antidrogas en el contexto de estas serias acusaciones