
El representante del sector cárnico en Tarija, Omar Figueroa, desmintió categóricamente las versiones que circulan en algunos medios y redes sociales respecto a supuestas ganancias excesivas de los carniceros. Aclaró que es “absolutamente falso” que el gremio obtenga Bs 30 de ganancia por cada kilo de carne vendido, y denunció que esa información distorsiona la realidad económica que enfrenta el sector.
Figueroa explicó que detrás del precio final de la carne existen múltiples costos que deben cubrir los productores y comercializadores: desde la compra del ganado, el transporte y la faena, hasta los gastos operativos y la participación de intermediarios. “Las ganancias reales son mínimas, y aún así hacemos el esfuerzo por mantener un producto de calidad para la población”, sostuvo. Asimismo, justificó la diferencia de precios entre Tarija y otras regiones como La Paz, señalando que la carne tarijeña es de primera calidad, proveniente de ganado joven y bien alimentado, a diferencia de otras ciudades donde se ofrece carne de menor valor nutritivo.

El dirigente pidió a la población no dejarse llevar por especulaciones y valoró el trabajo diario que realiza el sector para garantizar carne fresca, segura y de buena calidad. Finalmente, exhortó a las autoridades a asumir un rol activo en la fiscalización del mercado y en la lucha contra la desinformación, que solo perjudica a productores responsables y confunde a los consumidores