
En el segundo día de la XVI Cumbre de los BRICS, los líderes de los nueve miembros del grupo aprobaron la declaración final que introduce la «modalidad de país socio». Esta medida responde al creciente interés de los países del Sur Global por unirse a esta entidad, destacando la importancia de fortalecer la cooperación internacional y la solidaridad entre las naciones en desarrollo y los mercados emergentes.
Yuri Ushakov, asesor de la Presidencia rusa, informó que el grupo acordó criterios clave para ser considerado un país socio de los BRICS. De los 34 países que han manifestado su interés en unirse, 13 han sido seleccionados para un proceso de evaluación que determinará su disposición para convertirse en miembros plenos o colaboradores del grupo.
La ampliación de los BRICS se produce en un contexto de creciente influencia geopolítica. Los nuevos miembros Etiopía, Egipto, Emiratos Árabes Unidos e Irán se unieron al bloque en 2023, mientras que la adhesión de Argentina y Arabia Saudita sigue en suspenso. El Kremlin ha señalado que, aunque hay diferentes posturas sobre la expansión, el proceso continuará sin imponer divisiones, como las de la OTAN o la Unión Europea.
Por su parte, el presidente brasileño Lula da Silva y el primer ministro indio Narendra Modi subrayaron el papel de los BRICS en el nuevo orden mundial multipolar. Con un PIB combinado que supera al del G7 en términos de paridad de poder adquisitivo, los líderes abogan por relaciones internacionales más equilibradas, una mejor distribución de recursos como las tierras raras, y la regulación global de tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial.