

El Gobierno Nacional ha aprobado el Decreto Supremo 5195, que establece un arancel cero para la importación de trigo y harina durante la presente gestión. Esta medida, busca reducir los costos de importación y asegurar la provisión de estos productos en el mercado nacional, asi lo dio a conocer el viceministro de Comercio y Logística Interna, Grover Lacoa
Lacoa explicó que el Decreto Supremo 5195 permitirá a los industriales molineros y cualquier persona jurídica o natural importar trigo y harina no solo de los mercados tradicionales del Mercosur, como Argentina y Paraguay, sino también de otros mercados internacionales. «El objetivo es reducir los costos de importación para garantizar que nuestros industriales y comerciantes tengan acceso a estos productos esenciales sin restricciones, y así mantener la estabilidad en los precios para la población», subrayó Lacoa.
La decisión del Gobierno surge en un contexto de presión por parte de algunos sectores que buscan desestabilizar el mercado. En respuesta a las recientes declaraciones de Fidel Paco, secretario de la Federación de Panificadores de El Alto, quien instruyó a sus afiliados a ocultar la harina ante inspecciones de Emapa, Lacoa fue enfático en anunciar medidas judiciales contra tales acciones. «No permitiremos que personas con intereses políticos dañen el esfuerzo del pueblo boliviano y del Gobierno nacional para mantener la estabilidad de precios. Tomaremos los recaudos necesarios desde la parte judicial para garantizar que este tipo de comportamientos no queden impunes», advirtió la autoridad.
El viceministro Lacoa también reiteró que, por instrucción directa del presidente Luis Arce, se garantiza la provisión de harina al sector panificador a un precio accesible, asegurando la entrega del quintal de harina a Bs. 136. «El Gobierno está comprometido con el bienestar de la población y con la estabilidad de los precios de productos básicos como el pan, un alimento esencial en la mesa de todos los bolivianos», concluyó.